Saludo de los buenos días n º 934 del Rector Mayor de los Salesianos.
Buenos días, mis queridos amigos y amigas.
Les deseo un buen comienzo de semana. Supongo que se preguntarán qué es lo que quiero decir con este título tan enigmático. Te lo digo ahora mismo.
He encontrado esta foto-imagen que dice. » todos le temían, pero david nunca llamó a Goliat » gigante «. ningún problema merece cosas de grandeza «.
Y me pareció muy creativo el mensaje y digno de ser un poco más profundo porque, sin duda, no quiero menospreciar lo que cada uno de nosotros puede llevar en el corazón de pesada, algo que a veces parece insoportable. Sin duda habrá situaciones que son realmente problemáticas o tristes, o simplemente duras y que nos han afectado. Es comprensible.
Pero también en esas situaciones, y lo sabemos muy bien, es muy importante la actitud personal. Siempre he creído que tenemos que ser los primeros en ayudarnos en los momentos difíciles.
Qué quieres decir con que nos ayudes? Simplemente no nos deja envolver en nuestros pensamientos negativos y duros que como un torbellino pueden arrollar. Ayudarnos a no perder el horizonte. Ayudarnos a saber el tamaño… es decir, reconocer que tal vez lo que me pesa no merece el calificativo de gigante… como el paso bíblico de David y Goliat.
Somos muy fuertes. Siempre recuerdo a mi abuela, anciana, sin nunca haber ido a la escuela, pero con la sabiduría popular, que decía, a veces entre los dientes y sus oraciones: «Dios no nos dé todo lo que podemos soportar», porque somos realmente Mucho más fuertes de lo que podemos creer.
Vamos, queridos amigos y amigas. Alejamos a los Goliat de nuestras vidas. No vamos a dejar espacio. Y hacemos todo lo que podemos, incluso hoy, para tener un día bendito.
Con cariño y cordialidad, Ángel. r.m.